¡¡¡¡¡¡¡¡¡DEJENNOS NACER!!!!!!!

Déjennos Encarnar.

A través de los siglos el progreso de la humanidad se ha ido desbalanceando debido a las guerras, el poder por parte de los supremáticos, la religión, el controlar la gente por medio del miedo, la lucha religión contra estado y el hombre (sobre la mujer) dominando todos los aspectos sociales. Los "sacerdotes" (o todo tipo de jefe religioso; de cualquier religión) se han encargado de la parte moral, espiritual y esotérica de la vida. Los científicos, militares y gobernantes se encargan de la parte social y dejan al sacerdote a través de la religión la tarea de manejar la mente humana como gusto y gana les ha dado. Estos nunca han enseñado al hombre el secreto verdadero de la vida; la existencia del espíritu.

Sin embargo el mayor desbalance de la humanidad y por ende de la sociedad es debido a el Control De La Natalidad. Desde tiempos inmemorables el hombre ha buscado la manera de burlar la naturaleza (evitando los hijos) y lo ha logrado pero a un alto costo. Lo peor es no ver, saber o no entender las consecuencias de esta acción. El control de la natalidad se ve como falta moral bajo el aspecto religioso, pero no se ve como causa contra lesa humanidad e inmoralidad social y cívica. El mayor mal ejemplo lo dan los célibes sacerdotes que “no” procrean y ahora hasta de los varones abusan.

Desde la antigüedad a estos tiempos modernos el hombre ha desarrollado métodos contraconceptivos (anticonceptivos) y se ha aliado del aborto para evitar la natalidad. Ambas métodos controlan la natalidad. Nadie entra al mundo por puerta falsa. Todo en el universo está planificado y creado con un propósito. La necesidad es madre de la creatividad y el desarrollo de lo necesitado. Cada cosa que existe en nuestro planeta (como ejemplo del todo) ha sido desarrollada con un propósito y que ulteriormente es servir al hombre. El agua, la luz solar, los tres reinos de la naturaleza, todos y cada uno tiene su propósito y está aquí por una planificación superior y no por casualidad o al azar.

La humanidad desconoce la existencia del plano espiritual y la planificación que conlleva encarnar. Esto requiere el buscar espíritus afines; encarnados; para que ellos brinden la oportunidad de ser los padres del espíritu a encarnar. Esta es una tarea titánica dada las condiciones y la baja probabilidad de encarnar debido al cuento de la sobrepoblación mundial y la necesidad económica. Llegada la situación los padres designados utilizan algún método contraconceptivo y ahí se rompe la cadena de eventos que naturalmente tenía que desarrollarse. De aquí en adelante se forma el desbalance individual porque le atrasan la oportunidad a un espíritu para ser, ser humano. Esto rompe la cadena de eventos de una vida que no nació. Imaginemos esta situación repetida millones y millones de veces por cada espíritu que ve frustrada su encarnación.

Los que no logran encarnar hacen turno merodeando entre sus futuros padres y se forma un tumulto para tratar de nacer, sumemos a estos los espíritus que habian logrado encarnar pero que por otras circunstancias desencarnan antes de tiempo; por las guerras, enfermedades, hambre, miseria y desastres naturales entre otros. Se forma una fila desenfrenada de espíritus que buscan la menor oportunidad de empujar a un hombre y una mujer a juntarse en el acto conceptivo para ellos lograr la entrada al mundo.

El espíritu que necesita encarnar y ha sido retrasado, “matado”, evitado, etc. está en un estado anímico que por su necesidad no mira condiciones sociales, económicas, ni de como se puedan perjudicar socialmente sus padres, sean estos jóvenes inmaduros que no estan listos para ser padres o sean estos hombre y mujer casados por separado y cometan adulterio. El incesto, las violaciones (sexuales), enamoramiento entre diferentes edades, y cualquier otra situación sexual radical son resultado directo de la obsesión que producen en los encarnados, los espíritus que quieren encarnar.

Cada espíritu a la hora de encarnar traza su plan de vida. Quienes serán sus padres, ambiente en el que crecerá, quién o quienes serán sus hermanos (sea por motivo de expiación o de afinidad; igual con los padres escogidos), quién será su compañera/o, educación, trabajo etc. Este plan general depende del plan de todos los demás. Si se necesita encarnar para X (équis) fecha porque el espíritu que será su compañero/a encarnará también pero los futuros padres evitan los hijos o los abortan, el plan de vida se ve totalmente alterado. Como ejemplo más popular tenemos los casos de maestras de escuela que han tenido hijos de niños estudiantes. Socialmente esto es inmoral pero espiritualmente tiene explicación.

Muchos males mentales que padece el ser humano son causados por la obsesión que les ocacionan los espíritus afines que ellos evitan tener como sus hijos. La esquizofrenia, depresión, mal humor, descontento, arranques impulsivos, etc. son algunos de los ejemplos resultado de la obsesión.

El espíritu afín frustrado de no poder encarnar a través del comprometido a ayudar, lo obsesiona. Las parejas que evitan los hijos se son infieles por todos estos mismos motivos. Hay miles de situaciones que no se pueden cubrir en este corto escrito pero si se toma el concepto, se puede ver y explicar cada una de ellas.

Dentro de las enseñanzas y mandatos de todos los tiempos está el: “crecer y multiplicaros”. La recompensa a todos los sufrimientos y trabajos que pasa el espíritu encarnado es el goce del placer sexual; pero éste tiene su propósito y responsabilidad.

R Hdz.